La socialización de un cachorro ocurre entre los 3 y 4 meses de edad. en esta etapa de sus vidas es cuando ellos absorben sensaciones, aprendizajes, experiencias positivas y negativas.

Por ello es muy importante que empiece desde temprana edad su rutina de higiene, y hacerlo de manera respetuosa y positiva para que en un futuro sus experiencias a la hora de asearse sean positivas y lo más agradables posibles. 

Si crees que tu cachorro necesitará acudir a la peluquería deberás elegir a un profesional cualificado lo antes posible, que te asesore y te oriente. Lo ideal es que tenga un protocolo adecuado a los cachorros y sus primeras sesiones. Es muy importante que tu perro se acostumbre al manejo de otras personas para ayudarte con su higiene y su mantenimiento. 

¿Qué pasa si decido esperar? acudir a un profesional cuando el perro sea más mayor, sea demasiado grande para manejarlo,  esté en plena muda, o se nos haya ido de las manos su mantenimiento y se nos haga imposible deshacerse de enredos, cortarle las uñas, limpiar oídos, etc…

En el peor de los casos es que su paso por la peluquería sea estresante e incluso no se le pueda llegar a realizar el servicio correctamente.  Los profesionales trabajamos con herramientas cortantes, maquinaria que hacen ruidos con los que la mascota no se ha familiarizado. 

Todo ello convierte el servicio de peluquería en una operación peligrosa para el peluquero y el perro. Debido a la delicadeza de la situación la sesión puede alargarse considerablemente, aumentando así el coste del servicio. Todo esto se podía haber evitado habituando al perro desde pequeño a su rutina de higiene en la peluquería.